Kundalini procede de la palabra sánscrita “kundal” que quiere decir enroscar; se la imagina como una serpiente que en reposo y durmiendo está tres veces y media enroscada en el Chakra Muladhara o Chakra Raíz. “Estas tres vueltas representan los tres estados de la energía (positiva, negativa, neutra). La media vuelta se refiere a la constante disposición de la kundalini de pasar de energía estática a la genética”. Numford
Al despertar, esta energía adormecida dentro de todos los seres vivos, se mueve con movimientos ascendentes y descendentes en espiral como una serpiente. Por este motivo a la Kundalini, también se la conoce como la “Serpiente Mística”.
Cuando la energía de la Kundalini está bloqueada, el Chakra más próximo al bloqueo empieza a moverse muy deprisa y se vuelve dinámico, originando una energía específica que rompe el bloqueo, impulsando a los demás Chakras a girar los cuales empiezan a revivir y a vibrar.
Podría decirse que estas ruedas o centros se convierten en Chakras cuando reciben la energía en movimiento, esta se desplaza de los Chakras inferiores al séptimo Chakra, el de la Coronilla.
La principal técnica para despertar la energía de la Kundalini es a través de la respiración o prana, fuente de toda energía y poder que existe y que está presente en todo ser vivo. La respiración o prana, genera y conserva la energía y ayuda a que la fuerza vital vaya hacia arriba cuando esta energía está bloqueada; así si el flujo biológico natural, es descendente; el espiritual es ascendente.
Texto extraído del libro “Los Chakras – Mandalas de Energía”
Autora Tat – Montserrat Estrada
Edit. mtm